Llevo participando de la Universal solo hace meses, estaba con una enfermedad hace aproximándose un año, apareció de la nada, mi ombligo y mis ojos comenzaron a volverse rojos, fui al médico y me dieron un tratamiento para aplicar pomadas, cremas, remedios y aún así nada acontecía, los médicos no sabían lo que tenía. Participando de los días viernes de liberación, a través de las oraciones ocupé mi fe y pude ser completamente libre de esa enfermedad, hoy me encuentro sanada y feliz, ya que también me he sentido más ligera y libre de todo peso que tenía cuando llegué.
Marcela